Combate del 2 de Mayo
Pintura de Rafael Monleón y Torres (1843-1900) que representa el bombardeo de Callao
durante el Combate del 2 de Mayo de 1866.
Docente adscrito a la Facultad de Humanidades
Después de enterados de esto, los españoles enviaron a España a Eusebio Salazar y Mazarredo, regresando posteriormente con el cargo de Comisario Extraordinario para el Perú y solicitando una entrevista de carácter oficial con el Ministro de Relaciones Exteriores, Juan Antonio Ribeyro Estada. Este le respondió que la reunión sería confidencial ya que no le reconocía el título que se le confirió en España, ya que equivalía a considerar que Perú seguía siendo colonia española, una falta de respeto a la soberanía e Independencia del Perú sellada con la Capitulación de Ayacucho 42 años atrás. La reacción de Salazar y Mazarredo fue la de indicar a Luis Hernández-Pinzón y Álvarez de Vides, comandante General de la Escuadra del Pacífico, que debido a la negativa de que Perú haga justicia ante los acontecimientos de Talambo, la escuadra española tome, en respuesta, las islas Chincha, ricas en guano. Era el 14 de abril de 1864. De inmediato, España envió buques para reforzar la Escuadra del Pacífico. Chile apoyó a Perú con la negativa de colaborar con el abastecimiento de las embarcaciones españolas.
En noviembre del mismo año, la Junta de Guerra Peruana determinó que era imposible vencer a las fuerzas españolas. En diciembre llegó de España el vicealmirante José Manuel Pareja y Septien para reemplazar a Hernández-Pinzón. Posteriormente, con aprobación del gobierno peruano, se firmó el Tratado de Vivanco-Pareja entre Perú y España en la fragata española Villa de Madrid anclada frente al Callao, el 27 de enero de 1865. Firmaron representantes de Perú y España, Manuel Ignacio de Vivanco Iturralde y José Manuel Pareja y Septien respectivamente. Este vergonzoso documento establecía entre otros acuerdos, la desocupación de las islas Chincha (España) y el pago a España de 3 millones de pesos como indemnización por los gastos causados (Perú).
El 2 de febrero de 1865, dicho tratado fue ratificado por el presidente del Perú, Juan Antonio Pezet y Rodríguez de la Piedra. El 28, el coronel Mariano Ignacio Prado Ochoa se levantó en armas desde Arequipa derrocando a Pezet, por haber firmado tan humillante tratado, tomando el poder como Jefe Supremo del Perú. Tuvo el apoyo de la mayoría de peruanos.
Pareja mientras tanto, exigió a Chile que levante las restricciones contra el aprovisionamiento de los barcos de la escuadra española. Ante la negativa, ordenó el bloqueo de las costas chilenas. Chile respondió declarando la guerra a España el 25 de setiembre de 1865. El 26 de noviembre, la corbeta chilena Esmeralda capturó a la goleta española Virgen de Covadonga. Esto provocó el suicidio del vicealmirante Pareja. Meses después, el 12 de enero de 1866, Perú y Chile firmaron una alianza y declararon la guerra a España. Poco después, se unirían Ecuador y Bolivia.
El 7 de febrero del mismo año, 1866, se enfrentaron las fuerzas navales peruano-chilenas contra las españolas sin resultados concluyentes adjudicándose ambos bandos la victoria. El nuevo comandante general de la escuadra española, Casto Méndez Núñez, en cumplimiento de las órdenes dadas por el gobierno español, bombardeó, contra su voluntad, el indefenso puerto de Valparaíso. Luego de este nefasto acto, la escuadra española enrumbó a la isla San Lorenzo, frente al Callao.
El 2 de mayo de 1866, Callao contabilizaban como defensa, un total de 69 cañones, 56 en las baterías y 13 en los buques de guerra, mientras que la Escuadra Española contaba en total con 272 cañones. A las 11:50 horas, la embarcación española “Numancia” comenzó el bombardeo. Al tercer disparo español, los cañones peruanos de la Torre de La Merced respondieron al ataque por orden de José Gálvez Egúsquiza, ministro de la Guerra, quien no permitió a los artilleros peruanos disparar hasta que no lo hicieran primero los españoles. A las 13:00 horas, una granada española, cayó sobre los saquetes de pólvora de uno de los cañones de la Torre de La Merced. Al estallar murieron 41 hombres, entre ellos el ministro José Gálvez. Tras casi 5 horas de fuego constante, a las 16:45, la escuadra española decide dar por finalizado el combate. Sobre las 17:50 horas, cuando la escuadra española ya estaba cercana a la isla de San Lorenzo, los tres cañones peruanos del Fuerte Santa Rosa efectuaron sus últimos disparos.
Al final del combate, ambos bandos se adjudicaron la victoria. Los españoles porque afirmaron que ninguna de sus embarcaciones fue hundida y pudo regresar toda la escuadra a España. Los peruanos afirmamos que las baterías mantuvieron el fuego durante todo el combate y, a excepción de la ubicada en la Torre La Merced, que explotó, no se sufrieron daños que impidieran continuar disparando. Independientemente de todo, se logró que España desista de sus intentos de tomar posesión de nuestras islas guaneras y ratificar nuestra soberanía ante cualquier país extranjero.
Bibliografía:
- Aguado Cantero, Rodolfo (1988). El precedente de la Hacienda de Talambo en el conflicto hispano-peruano de la segunda mitad del siglo XIX.
- Pons Muzzo, Gustavo (1966). Historia del conflicto entre el Perú y España, 1864-1866.
- Cerda Catalán, Alfonso (1977). La guerra entre España y las repúblicas del Pacífico, 1864-1866.
- García Martínez, José Ramón (1994). El Combate del 2 de mayo de 1866 en El Callao: Resultados y conclusiones.